Esta es la historia del ingenio humano y los enormes logros de la humanidad en general. En parte, está relacionada con todo lo ingenioso de los OSS, pero hace numerosas comparaciones con… la exploración del espacio.

Apolo 11 es famosa por ser la misión que llevó el hombre a la Luna por primera vez. Pero no nos olvidemos que fue la misión Apolo 8 la que sentó algunas de las bases más importantes que facilitaron el alunizaje exitoso.

Apolo 8 consiguió realizar varias tareas por primera vez en la historia: ser el primer vuelo tripulado en escapar a la órbita terrestre baja, pero, sobre todo, el primero en realizar una órbita de la Luna.

Es este último logro que tiene la mayor importancia en términos de sistemas de comunicaciones. Es que, al realizar la órbita lunar, la trayectoria del módulo de comando lo llevó al otro lado de la Luna.

 

Dos de las etapas más desafiantes de la misión Apolo 8 fueron la Inserción en Órbita Lunar (Lunar Orbit Insertion, LOI), es decir, la entrada en la órbita de la Luna, y la Inyección Transterrestre (Trans-Earth Injection, TEI), que consistió en extraer el módulo de control de su órbita lunar y trazar la ruta de regreso a la Tierra. La LOI requería que la tripulación arrancara los motores en el momento y durante el período exacto, para decelerar el módulo lo suficiente como para entrar en la órbita lunar. La TEI requirió una operación similar, pero con el fin de expulsar el módulo de la órbita lunar y regresar a su camino de regreso a casa. Ambas maniobras se realizaron desde la cara oculta de la Luna y sin comunicación por la radio con el control de la misión en Houston.

 

En caso de la TEI, si no hubieran arrancado los motores, los astronautas quedarían varados en la órbita lunar. La propulsión demasiado fuerte podría haber hecho que el módulo se estrellara contra la Luna. Si hubiera sido demasiado débil, habría podido expulsarlo hacia el espacio. Los tres escenarios habrían dejado a los astronautas varados.

 

En cada una de las diez órbitas lunares de Apolo 8, las comunicaciones se perdieron en el otro lado de la Luna, dejando al control de la misión sin nada que hacer hasta que la transmisión se reanudara, una vez que se pudieran volver a recibir las señales. Después del importantísimo quemado TEI, el control de la misión recibió la telemetría del módulo de comando a las 89 horas, 28 minutos y 39 segundos de la misión: en el lugar y momento correctos. Este triunfo de ingeniería le confirmó al equipo que toda la planificación y ejecución de la misión en el lado lejano de la Luna terminó dirigiendo la nave y la tripulación de Apolo 8 hacia la Tierra.

 

Hemos aquí la analogía con el Inventario de Red Física (Physical Network Inventory, PNI). La planta física donde encontraremos cables, cajas de empalmes, paneles de conexión, etc. está permanentemente en “la cara oculta de la Luna”, sin que su señal pueda llegar al control de la misión (es decir, los centros de operaciones de red). Estos dispositivos pasivos no tienen API y no son capaces de informar de su estado actual, rendimiento, conectividad, etc.

 

El centro de operaciones no tiene visibilidad alguna de lo que realmente está sucediendo en el campo. Hay muchas cosas que pueden fallar, tanto debido a un error humano o una mala planificación, o simplemente por mala suerte, accidentes o incógnitas. Al igual que el control de la misión en Houston, los centros de operaciones trabajan la red física a ciegas. Dependen completamente de la planificación previa, obra de diseñadores, y de los sistemas, así como de las acciones de astronautas (técnicos) que son testigos de la realidad del campo.

 

Los OSS son una herramienta vital para el éxito de las misiones de telecomunicaciones. Son las herramientas gracias a las que los diseñadores pueden diseñar, planificar y seguir la construcción de la red física. Son las herramientas que permiten a la mano de obra de campo chequear si la red está configurada según lo planeado (o si se habrá desviado del plan). Son las herramientas que permiten a los grupos centrales de operación comprender lo que debería estar efectuándose mientras esperan a que lleguen los informes del campo.

 

El OSS, o más específicamente, las herramientas PNI, son el mecanismo esencial que permite a los planificadores, operadores y técnicos (astronautas) comunicarse de manera consistente y coordinar actividades para que la infraestructura física pueda realizar su tarea principal: brindar servicios a los clientes.

 

Es posible que, al interactuar con las herramientas PNI, los planificadores, operadores y técnicos no teman tanto las consecuencias como el personal de la misión Apolo 8. No es que vayamos a dejar a unos astronautas varados en el espacio sin la posibilidad de regresar a la Tierra. Sin embargo, potencialmente sí podemos dejar a los clientes varados (y sin servicio). En la mayoría de los casos, esto es tan solo una molestia. Pero en las situaciones que involucran a los enlaces de comunicación críticos, tales como los servicios de emergencia, la e-salud, las alarmas de seguridad e incluso el control de semáforos, sí estamos hablando de cuestiones de vida y muerte.

 

Las herramientas PNI deben proporcionar la funcionalidad de registrar y ver datos, para que el personal combinado pueda garantizar la disponibilidad de la red, así como diagnosticar y solucionar los imprevistos a medida que surjan. Un factor, a veces olvidado, es que las herramientas PNI igualmente deberían de asegurar la integridad funcional de los datos a nivel alto. No es, claro, la responsabilidad únicamente del PNI, sino también de los procesos humanos y mecánicos que se construyen a su base.

 

Las herramientas OSS de SunVizion se han desarrollado en torno a los flujos de trabajo de extremo a extremo para ayudar a comunicar y coordinar los eventos que afectan lo que está sucediendo en la cara oculta de la Luna:

  • Planificación de redes: para garantizar diseños y conciliaciones coherentes (y automatizados)
  • Gestión de implementación: para garantizar las compilaciones confiables y repetibles
  • Configuración de red: para garantizar la disponibilidad de los datos más recientes sobre los planes de configuración de red, es decir, proveer la visibilidad remota de lo invisible; y lo más importante:
  • la configuración de red de extremo a extremo y la gestión del ciclo de vida de activos a través de la red mediante el inventario de recursos

¿Puede confiar en su OSS para poder ver la cara oculta de su Luna? De lo contrario, contáctenos para averiguar cómo podríamos mejorar el apoyo a su control de la misión.