La evolución acelerada de las redes de telecomunicaciones ha abierto nuevas posibilidades para la innovación y la conectividad. Sin embargo, también ha traído consigo importantes desafíos para gestionar de forma eficiente toda la red y los distintos componentes que la integran. La Gestión del Ciclo de Vida de los Activos y de la Red (ALM/NLM, por sus siglas en inglés) abarca todas las etapas: planificación, diseño, adquisición, despliegue, operación, seguimiento y retirada de los activos de red. Una gestión eficaz de este ciclo es fundamental para que los operadores sigan siendo competitivos.

En este artículo analizamos los principales retos del ALM/NLM y explicamos cómo las soluciones OSS (Operation Support Systems) permiten a los operadores superarlos, especialmente gracias a sus avanzadas capacidades de automatización.

¿Qué es la gestión del ciclo de vida de la red?

La Gestión del Ciclo de Vida de la Red (NLM) es un enfoque estratégico que abarca desde el diseño inicial de la red hasta su desmantelamiento final. Su objetivo es garantizar que la red sea confiable, segura y flexible ante nuevas exigencias. A diferencia de un mantenimiento reactivo, la NLM adopta una visión proactiva: optimiza el rendimiento, reduce interrupciones y controla los costes. En un entorno donde el 5G, la computación en la nube y las redes definidas por software evolucionan constantemente, una gestión eficiente del ciclo de vida se vuelve imprescindible para mantener la conectividad y el rendimiento a largo plazo.

Principales desafíos de la NLM

1. Aumento de la complejidad de la red
Las redes modernas son cada vez más complejas, especialmente con la introducción de la virtualización y otras tecnologías avanzadas. Esto dificulta llevar un inventario preciso, identificar dependencias, registrar cambios de estado y predecir el comportamiento de la red en distintos escenarios.

2. Altos costes y consumo de recursos
El diseño, despliegue y mantenimiento de redes requiere una gran inversión en tiempo, capital humano y recursos financieros. La falta de coordinación o eficiencia en cualquier fase del ciclo de vida puede provocar retrasos y sobrecostes. En redes a gran escala, incluso mejoras pequeñas en eficiencia pueden tener un impacto significativo.

3. Falta de visibilidad en tiempo real
Las decisiones operativas requieren datos actualizados y conectados. La falta de información precisa o los silos de datos pueden llevar a respuestas tardías ante incidencias, mala asignación de recursos, fallos de mantenimiento y pérdida de ingresos. Un ejemplo común es el de los “activos varados”: equipos adquiridos que, al no estar correctamente registrados en el OSS, no se utilizan aunque sigan generando costes.

4. Cumplimiento normativo
Los operadores deben enfrentarse a regulaciones complejas y cambiantes según la región. Cumplirlas exige documentación exhaustiva y procesos de control, lo que añade otra capa de dificultad a la gestión de la red.

5. Complejidad de las distintas fases del ciclo de vida
Cada etapa —diseño, creación del BOM (lista de materiales), adquisición, logística, almacenamiento, despliegue, puesta en marcha y operación— presenta sus propios retos:

  • Rastrear movimientos y cambios de estado de los activos, desde el proveedor hasta el campo, puede ser muy laborioso sin herramientas automatizadas.
  • Elaborar BOMs precisos que reflejen correctamente el diseño técnico es difícil sin sistemas integrados.
  • Aceptar materiales en el sitio puede ser complicado cuando los componentes internos (por ejemplo, de un router) figuran en el BOM pero no son fácilmente identificables.

6. Gestión del fin de vida útil
Retirar equipos obsoletos requiere planificación cuidadosa para cumplir con normativas ambientales, evitar el desperdicio de recursos, mantener la sincronización con otros sistemas (como contabilidad) y reducir los tiempos de inactividad durante sustituciones.

Soluciones OSS diseñadas para superar estos desafíos

Los OSS más avanzados proporcionan visibilidad de extremo a extremo, automatización y control sobre todo el ciclo de vida de los activos de red. Diversos módulos —tanto dentro de los OSS/BSS como en sistemas integrados— intervienen a lo largo del proceso. Veamos cómo lo hacen:

1. Del diseño a la generación del BOM
Herramientas como Smart Service Designer integran motores de diseño inteligente (como AI Net Planner) con sistemas operativos como Network Inventory, permitiendo crear redes optimizadas desde el punto de vista técnico y económico. Además, generan automáticamente BOMs precisos, lo que reduce errores y facilita la transición a la fase de adquisición.

2. Adquisición y seguimiento de entregas
SunVizion integra los BOMs con procesos de compras y sistemas adyacentes como ERP o gestión de activos. Gracias al seguimiento casi en tiempo real, los operadores tienen visibilidad completa desde la entrega del proveedor hasta el despliegue, lo que permite detectar cuellos de botella y mejorar la planificación.

3. Despliegue, puesta en marcha y operación
Con el módulo Network Roll-Out Management, SunVizion supervisa cada paso del despliegue, asegurando que se realice según lo previsto. Una vez en funcionamiento, las soluciones de Inventory y Network Configuration Management permiten controlar el estado operativo de la red mediante modelos personalizables de cambios de estado.

4. Mantenimiento, operación y optimización
Las soluciones OSS integran funcionalidades de gestión de fallos, monitoreo de rendimiento y análisis predictivo. Esto permite prevenir interrupciones y prolongar la vida útil de los activos. En caso de fallos, Network Inventory ayuda a gestionar la reparación mediante información sobre:

  • Estado del activo (operativo, DOA – muerto al llegar, en reparación)
  • Ubicación (almacén, sitio, taller)
  • Historial de intervenciones

5. Retirada y reciclaje
Las soluciones OSS más avanzadas facilitan la gestión del desmantelamiento, garantizando el cumplimiento ambiental, una documentación precisa y el reciclaje o eliminación eficiente de los recursos.

Beneficios de un enfoque integral en la gestión del ciclo de vida

La plataforma SunVizion permite obtener beneficios tangibles:

1. Asignación eficiente de recursos
Al centralizar los datos de los activos, los operadores pueden gestionar mejor los recursos en todas las fases: adquisición, mantenimiento, despliegue y retirada.

2. Optimización de costes y flujo de caja
La automatización en diseño, logística y mantenimiento permite reducir desperdicios y controlar gastos. Además, asegura la disponibilidad de equipos justo a tiempo, mejorando el rendimiento financiero y contable (vida útil, amortización, planificación de reemplazos, etc.).

3. Mayor calidad del servicio
Una red bien gestionada garantiza mayor disponibilidad, satisfacción del cliente y menor rotación.

4. Cumplimiento normativo simplificado
Los registros automáticos y trazables permiten cumplir fácilmente con auditorías y regulaciones técnicas, contractuales y medioambientales.

Tradicionalmente, la gestión del ciclo de vida de las redes ha sido un proceso manual, fragmentado y costoso. Su futuro pasa por la automatización, el uso de inteligencia artificial y la colaboración entre todos los actores del ecosistema. Pero para automatizar, primero hay que comprender el proceso. Las soluciones OSS/BSS de SunVizion lideran esta transformación, ofreciendo a los operadores las herramientas necesarias para entender, automatizar y adaptarse continuamente a las nuevas tendencias tecnológicas.